Conocido ya el nuevo Gobierno, la Cartera de Justicia seguirá siendo ocupada por el Ministro Rafael Catalá Polo, no produciéndose por tanto ningún cambio en este puesto. En los próximos días conoceremos si se confirman también en sus puestos los actuales altos cargos integrantes de su equipo.
Rafael Catalá llegó al Ministerio tras el cese de Alberto Ruiz Gallardón, y su mandato se ha caracterizado, al menos en su primera etapa, por su predisposición al diálogo con todos los sectores implicados en la Administración de Justicia, incluidos los representantes de los funcionarios. Gracias a este diálogo, los sindicatos conseguimos frenar la aprobación de una desastrosa nueva Ley Orgánica del Poder Judicial y la privatización del Registro Civil, proyectos estrella de Gallardón. Así, y gracias a la presión de numerosos sectores y la de STAJ y las organizaciones sindicales que suscribimos el preacuerdo de junio de 2014 (con la oposición de CCOO), el entonces nuevo Ministro Catalá abandonó el proyecto de su predecesor dejando el anteproyecto en una mera reforma de la Ley vigente, que aunque siendo bastante ambiciosa, gracias precisamente a aquel preacuerdo no produjo los enormes cambios –y perjuicios- que el anteproyecto originario preveía. Y en cuanto a la privatización del Registro Civil, la presión social y también sindical logró que Catalá aparcara también otro de los proyectos estrella de Gallardón, si bien queda aún por determinar cómo quedará el Registro Civil ya que la Ley de Registro Civil de 2011, que es la que consagra su desjudicialización, no ha sido derogada, sino únicamente retrasada en su entrada en vigor, que será en julio de 2017.
Con este Ministro también se ha suscrito el Acuerdo de diciembre de 2015 con las cuatro organizaciones sindicales presentes en la mesa sectorial nacional de Justicia, pendiente aún de cumplimiento en algunas de sus partes, fundamentalmente en lo concerniente a la consolidación de los refuerzos estructurales en plantilla, solución a los problemas por errores en la cotización a la Seguridad Social, negociación de una nueva regulación de las sustituciones, así como la recuperación de todos los días de asuntos particulares que teníamos antes de los recortes de 2012. STAJ ya se ha dirigido al Ministro para exigir el cumplimiento inmediato de los puntos de aquel acuerdo aún no ejecutados.
Con Catalá también ha comenzado el impulso a la modernización de la Justicia en lo relativo a la introducción del expediente judicial electrónico y Justicia digital. Con unos inicios bastante convulsos en cuanto a los numerosos fallos que los sistemas están provocando, es imprescindible que el Ministerio solucione todos los numerosos problemas y disfunciones que la introducción del denominado “papel cero” están generando.
A todos los nuevos gobiernos se le conceden cien días de “gracia”. A Catalá no podremos dárselos porque no es nuevo y por ello, desde ya, exigimos que se ponga a trabajar para terminar todo lo pendiente y avanzar en la mejora de la Justicia. Desde STAJ seguiremos luchando por la recuperación de todos los derechos hurtados en los últimos años, y por la mejora de la carrera profesional y de las condiciones de trabajo de los funcionarios y funcionarias de Justicia de toda España, exigiendo al Ministerio que deje de perjudicar a unos para favorecer a otros.